Iván

Sin sentimiento propio y a la vez todo un sentimiento en sí mismo. Bella y ligera, libre pero atada, revestida por fuera y a la vez vacía por dentro. Un camino por recorrer, pero no delimitado, quizá imaginario, quizá inexistente. Rodeada de personas y a la vez sola, independiente pero que no se vale por sí misma. Pequeña y frágil, condicionada al constante desajuste, que se endereza con el tiempo. Firme pero nada fijo, simplemente feliz después de todo, de tantas lágrimas. Transformadas en las mismas lágrimas que ahora caen, pero con otro color, con otro sonido, con otra alma. Cada nota suena a ti, a esas tardes, dias y noches enteras. A cada momento, a cada instante. Los sonidos suenan a tu olor, a tu sonrisa, a tus enfados. Su reflejo habla por sí solo o tú reflejas su significado. Hasta su espacio le pertenece, te pertenece. El camino que no era claro, ha tomado forma, tú forma, tus curvas. Porque aquello que era imaginario en el pensamiento, ahora es tangible en alma. Porque "somos almas".