Alba
Mi patrimonio es un pendiente y el colgante de un collar. Para mi es importante ya que cuando tomé mi primera comunión mi abuela paterna estaba muy enferma, no podía caminar y apenas hablaba. Por su enfermedad no sabíamos si podría asistir a la celebración. Una tarde mi tía me pidió que fuera con ella a dar un paseo. Me contó que le hacía ilusión que tuviera un regalo de comunión de mi abuela, aunque ella no pudiera elegirlo para mí. Fuimos a una joyería y elegí un par de pendientes con su collar a conjunto. Afortunadamente el día de mi comunión mi abuela pudo asistir y a pesar de saber que ella no era la que había elegido el regalo para mí ese regalo siempre será el que mi abuela me dio el día de mi comunión.