Aroa R
Su anillo, el de vuestro amor, el que hace que te sienta tan cerca de mi cada día; gracias a mamá hoy lo tengo yo y la concha que la regalaste en aquella playa. El tiempo se quedó quieto y ni el viento se atrevió a decir una palabra; cuando los observo es como si tú aún estuvieses aquí, empujándome cada día, haciendo sacar lo mejor de mí, levantándome en cada caída, celebrando juntos cada conquista. Eres y siempre serás eterno.