Lucía A
Posiblemente para la mayoría de personas esta bota sería eso, una simple bota, pero para mí tiene un valor muy especial y que me une a dos personas muy importantes en mi vida, mi padre y mi madre. Esta bota campera fue la primera que he tenido y que además me regalaron mis padres. Yo era muy pequeña y obviamente no me acuerdo pero me han contado que era muy gracioso verme andar con ellas ya que me llegaban hasta las rodillas y no me dejaba andar bien, pero no por eso lo considero un patrimonio para mi, si no también porque mi padre es un apasionado del mundo del caballo y del campo que en parte me ha transmitido a mi y el hecho de tener algo que esté vinculado con él y con esa pasión que tiene me conmueve y hace que tenga un vínculo muy especial con esta bota.